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Si no comunicas lo contrario a la aseguradora, tu seguro se renueva automáticamente cada año. Sin embargo, esto no siempre es favorable, salvo que te beneficies de posibles bonificaciones. Pero, si quieres conseguir mejores condiciones de las que tienes, no debes conformarte con una renovación automática y revisar otras ofertas. Para hacer esto, puede resultar muy útil que utilices una herramienta para comparar seguros, como la de Arpem.com. Podrás comparar precios y coberturas de diferentes aseguradoras, en pocos minutos.
Antes de renovar tu seguro de coche, debes valorar todas las opciones y revisar mentalmente si estás satisfecho del trato que te da la compañía. Puede ser un buen momento para aprovechar otras ofertas y ver si puedes mejorar el precio que te ofrece en la actualidad. Pero, es importante tener claro cómo funciona todo el procedimiento para renovar o no una póliza. Las fechas, los plazos, qué pasos debes dar y qué derechos y obligaciones tienes.
La renovación de los seguros de coche es automática cuando llega la fecha de vencimiento. Esto quiere decir que, si ninguna parte comunica a la otra su deseo de no continuar, el contrato seguirá vigente durante un año más. Es lo que establece la Ley del Contrato de Seguro, que regula de forma clara la relación entre una aseguradora y sus clientes.
Si no quieres renovar tu seguro de coche durante otro año, se lo debes comunicar a la compañía por escrito con un mes de antelación a la fecha de extinción del contrato. Si lo tienes claro, no debes dejar de pagar, sin más, porque eso puede tener consecuencias graves: lo primero es quedarte sin cobertura y lo segundo constar como moroso y no poder suscribir otro seguro con otra compañía.
Lo habitual es que la póliza se renueve automáticamente, de forma que tú no tengas que hacer nada. Si no indicas nada a la compañía, la renovación se producirá en las mismas condiciones. Por eso, si quieres introducir algún cambio o beneficiarte de alguna mejora, lo mejor es que te pongas en contacto con tu compañía al menos un mes antes de que caduque la póliza.
Antes de renovar la póliza, la compañía está obligada a notificarlo al tomador, tanto si tiene previsto aumentar la prima de forma considerable y modificar, por tanto, el contrato, como si ha decidido no renovarlo Debe hacerlo por escrito y respetando los plazos contemplados. Esta información te puede ayudar a tomar una decisión, porque puede que estés satisfecho con la aseguradora, pero si la subida es muy sustancial, puede que cambies de opinión, si te llevas una sorpresa poco agradable con el precio.
Debes tener claros tus derechos: antes de que el seguro se prorrogue, el tomador tiene derecho a conocer si se han introducido cambios en las condiciones previamente aceptadas. Un cambio de este tipo supone un acuerdo distinto. La compañía tiene un plazo de dos meses para comunicar estos cambios o la no renovación del contrato. El plazo del que dispone el tomador es de un mes. Si la aseguradora no te avisa de cambios o subidas, tienes derecho a reclamar.
Si las condiciones cambian incluyendo un aumento de la prima no contemplada en el contrato, puedes oponerte a la renovación del seguro y cancelar la póliza. Esta cancelación, en caso de un cambio sustancial, puede hacerse incluso sin una notificación previa, si la compañía no ha respetado el plazo para notificar las variaciones en el contrato. En este caso, te respalda la Ley de Contrato de Seguro, que es la que fija las obligaciones tanto del asegurador como del asegurado.
Fuente: Ley de Contrato de Seguro
Es importante que tengas en cuenta varios elementos y hacerte una serie de preguntas que te servirán de ayuda para tomar una decisión:
Quizá haya llegado el momento de considerar otras posibilidades, esto es, valorar ofertas de otras entidades. La mejor forma de hacerlo es utilizando un comparador de seguros como el de Arpem.com, puesto que te ayuda a considerar numerosas opciones y, gracias a su equipo de asesores expertos, podrás aclarar todas tus dudas y tomar una decisión asesorada.
Las compañías aseguradoras aplican el llamado sistema bonus-malus, a la hora de gratificar o penalizar a los asegurados, dependiendo de su perfil de siniestralidad. Gracias a las bonificaciones, se puede ahorrar mucho dinero en el precio de la póliza cuando toca renovar el seguro.
Pero, hay que tener en cuenta que las compañías no aplican este sistema de la misma manera. No es tan fácil obtener una bonificación, es decir, una rebaja, a la hora de renovar la póliza, aunque no hayas tenido ningún parte en todo el año. Esta política y las condiciones que se requieren cambian mucho de una compañía a otra.
En algunas compañías puede tardar más de una década en obtener la bonificación más elevada. En otras, bastan tres años para alcanzar una importante rebaja. Infórmate de cómo funciona el sistema bonus-malus en tu compañía, de cuáles son los porcentajes máximos de bonificación y el tiempo necesario para conseguirlo, así como las penalizaciones. Hay algunas que respetan las bonificaciones que hayas acumulado con tu compañía actual si te cambias de compañía.
A la hora de tomar una decisión, es esencial tener una visión general de las pólizas que tienes disponibles en el mercado, de sus ventajas para nuevos clientes o de las promociones que ofrecen las aseguradoras para ellos.
Esta información te ayudará a elegir bien y a ahorrarte dinero. Con el comparador de seguors de coche Arpem se puede acceder a esta información de forma rápida y sencilla y podrás examinar con detalle las coberturas en las diferentes modalidades.
La información debe ser veraz
Una información veraz es un elemento esencial a la hora de contratar un seguro de coche, por eso debes comunicar a tu compañía cualquier cambio en tu perfil de riesgo. Si no proporcionas datos veraces, puede que pierdas el derecho a disfrutar de tu seguro. Uno de los datos fundamentales, por ejemplo, es alertar a la compañía de la inclusión de nuevos conductores, especialmente si son novatos. Esto incrementará la prima, pero, solo así, todos los conductores estarán cubiertos por completo.
Una compañía de seguros puede negarse a renovar la póliza del coche. La razón puede ser que tu perfil de siniestralidad haya aumentado considerablemente o porque trasladas muchos partes en poco tiempo. Igual que el tomador tiene derecho de cambiar de compañía, las aseguradoras también pueden cancelar la renovación de tu seguro.
Al principio puede ser que te hayan subido las primas, pero esto se produce hasta un límite, cuando la compañía decide que no le resultas rentable como cliente. Lo que penaliza es, sobre todo, la responsabilidad civil, es decir, los daños a terceros, no tanto los partes de daños propios. En caso de siniestro total, y si la reparación de tu coche cuesta entre el 75% y el 100% de su valor en el momento del accidente, la aseguradora te ofrecerá una indemnización y, acto seguido, se cancelará tu contrato.
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Ese plazo para avisar a la compañía de que no quieres seguir con ellos y que quieres cancelar el seguro es de un mes de antelación a la fecha de caducidad de la póliza.
Es obligatorio contratar y mantener en vigor un seguro para un coche que esté matriculado en España. No hacerlo puede suponer multas importantes y, en el supuesto de que ocurra un accidente, las consecuencias pueden ser fatales.
A la hora de comunicar a la compañía la no renovación de una póliza, hay que hacerlo por escrito, con al menos un mes de antelación a la fecha de vencimiento. Lo más aconsejable es enviar un burofax o una carta con acuse de recibo, aunque cada vez más compañías aceptan otros métodos a través de sus páginas web o por correo electrónico.
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