El sistema ABS ( Anti-lock Braking System o sistema de frenos antibloqueo) se encarga de prevenir el bloqueo completo de los neumáticos en la acción de frenado. Sus principales componentes son: sensores, unidad de control y modulador de presión.
Algunas de las ventajas de la instalación del sistema ABS son:
El propósito principal es permitir al conductor detener el vehículo con seguridad en la menor distancia posible, sobre todo tipo de superficie y en cualquier condición. Es importante que la potencia de frenado sea mayor a la del motor.
La función de los sensores ABS es controlar la velocidad de giro de las ruedas, la unidad de control recibe las señales que le envían los sensores y a su vez envía órdenes al modulador de presión que hace funcionar las válvulas, regulando de esta manera la presión en el sistema de frenos, lo que produce una frenada intermitente. Esto provoca una vibración en el pedal de freno, que dependiendo de la velocidad con la que se vaya conduciendo será ligeramente sensible o en un caso extremo se notará bastante y podría llegar a asustar al conductor. Pero sin duda alguna, resulta más eficiente que el bloqueo total de los neumáticos.
El sistema ABS forma parte de la seguridad activa en los automóviles, proporcionando mayor estabilidad al momento de frenar, permitiendo maniobrabilidad y ayudando a prevenir situaciones que pueden causar accidentes. En resumen, el hecho de que el automóvil cuente con el sistema de frenos ABS puede significar la diferencia entre la vida o la muerte, tanto para el conductor como para los involucrados.