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Ctra. Palma-Alcúdia, Km 30,
07300 Inca, Illes Balears
Horario: De lunes a viernes de 6:00h a 21:00h
Teléfono: 871 57 55 44/97150 58 12
Web: www.serviciositv.es
Para poder pasar la ITV, es necesario solicitar cita previa en la web de la estación de la ITV. Hay que proporcionar la matrícula y el tipo de vehículo, además de algunos datos personales, y la web te asigna una fecha y una hora en función de su disponibilidad. También se puede abonar la revisión en la web por adelantado y luego presentar el resguardo en la estación. Este sistema agiliza las citas y facilita el proceso. Si eres el titular, pero no puedes acudir a la revisión, conviene que autorices por escrito a tu sustituto, aunque no sea obligatorio.
La revisión de la ITV no presenta dificultades si el vehículo está en buen estado y dispones de la documentación necesaria. Pero, si tienes alguna duda sobre el estado de tu vehículo, puedes realizar previamente tu propia revisión: comprueba las luces, el dibujo de los neumáticos, los frenos, la dirección, las escobillas limpiaparabrisas, las puertas y las ventanillas. Algo esencial para que el vehículo pase la ITV es que todos sus componentes estén homologados. Una de las revisiones más importantes es la del control de emisiones, que trata de comprobar si las emisiones del vehículo son más contaminantes de los permitidos. Si quieres asegurarte de que no habrá problemas, puedes hacer una pequeña purga del motor de tu vehículo. Empieza por comprobar que el nivel de aceite en el motor es el adecuado: debe estar entre el máximo y el mínimo de la varilla del depósito. A continuación, pon en marcha el motor y haz varias aceleraciones con un intervalo de 30 segundos. Al llegar a la estación, el motor debe estar a unas 2.500 revoluciones por minuto, si es un vehículo ligero, y a unas 1.500, si se trata de un vehículo pesado. El ventilador debe estar en marcha. Mientras esperas tu turno, puedes dejar el motor al ralentí.
La documentación necesaria para pasar la ITV es el permiso de circulación y la tarjeta de la Inspección Técnica de Vehículos. Esta última debe ser la original, porque en ella se estampa un sello tras pasar la ITV. Pero si no la encuentras, siempre puedes solicitar un duplicado en la estación de la ITV. Los vehículos matriculados después de 2016, disponen de una tarjeta electrónica. Si extravías el permiso de circulación, puedes presentar una fotocopia o una nota simple de antecedentes que puedes solicitar en la Jefatura Provincial de Tráfico. No es obligatorio presentar el último recibo del seguro del vehículo, aunque puede ser útil tenerlo a mano.
Las citas de la ITV dependen de la matrícula del vehículo y de su tipo. Los turismos, por ejemplo, no deben pasar la ITV hasta pasados cuatro años desde su matriculación. Es importante que tengas en cuenta que dispones de 30 días naturales para pasar la ITV antes de que caduque la revisión anterior. Este periodo facilita el proceso, aunque no modifica el calendario de las revisiones posteriores.
Cuando pasas la revisión de la ITV, el resultado puede ser favorable, desfavorable o negativo. En el primer caso, podrás seguir circulando con tu vehículo sin problemas hasta la siguiente revisión. Pero, los diagnósticos desfavorables o negativos significan que la revisión ha encontrado problemas importantes que debes subsanar en un taller y regresar a pasar de nuevo la ITV. Un vehículo con un diagnóstico desfavorable sólo puede abandonar la estación para dirigirse a un taller. Un diagnóstico negativo supone que el vehículo sólo puede circular en grúa. En ambos casos, dispones de dos meses para volver a pasar la ITV.
La ITV es obligatoria y debe estar en vigor para poder circular en España. Si no tienes en regla, pueden ponerte una multa de 500 euros por una infracción grave. Las autoridades de Tráfico pueden también inmovilizar tu vehículo, si está en muy mal estado, porque puede suponer un problema para la seguridad de otros vehículos. Circular con la ITV caducada supone una multa de 200 euros.
Los vehículos pesados, de 3.500 kg, deben pasar la revisión de la ITV todos los años y, cuando alcanzan la década, deben hacerlo de forma semestral. Además, deben pasar una prueba especial de frenado, obligatoria desde 2019. Un caso peculiar es el de los remolques: sólo deben pasar la ITV cuando sobrepasan los 750 kg de peso. Los que están por debajo de ese volumen, no necesitan pasar la ITV, porque les cubre la ITV del vehículo al que están enganchados, al tener la misma matrícula.
Un vehículo histórico es aquel que ha cumplido 30 años, que conserva todas sus piezas originales o que ha dejado de fabricarse. Desde 2023, este tipo de vehículos no están obligados a pasar la ITV si fueron matriculados antes del 1 de enero de 1950. Al cumplir 40 años, deben pasar la ITV cada dos años, cada tres hasta los 45 y cada cuatro, a partir de los 45. Es obligatorio que los vehículos de importación pasen la ITV para poder circular por España.
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A la hora de escoger la estación para pasar la ITV, existe total libertad. No estás obligado a optar por una estación u otra, ni siquiera cuando se trata de una segunda revisión tras un diagnóstico desfavorable o negativo.
Cuando pasas la ITV, la estación te entrega una pegatina que debes colocar en la parte superior derecha del parabrisas. Esto es obligatorio porque informa a las autoridades de Tráfico de que el vehículo tiene la ITV en vigor. Si no la llevas, te pueden poner una multa de hasta 100 euros, ya que se considera una infracción leve, aunque la sanción no suele sobrepasar los 80 euros y no supone una pérdida de puntos.
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