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Ctra. Sant Miquel, Km 2,7
0784, Santa Gertrudis de Fruitera, Islas Baleares
Horario: Lunes a viernes, de 8:00h a 14:30 h y de 15:00h a 20:30h
Web: www.conselldeivissa.es
Teléfono: 971 19 59 06
Email: [email protected]
En la mayoría de las estaciones se puede reservar la visita para la ITV Ibiza con cita previa. Esto facilita el proceso y evita esperas innecesarias. Sólo necesitas proporcionar la matrícula y el tipo de vehículo. También puedes pagar la revisión a través de la página web y presentar posteriormente el recibo en la estación en el momento de la revisión. La cita, así como la revisión, debe tomarlas el titular del vehículo o una persona autorizada por él.
La inspección de la ITV Ibiza es relativamente sencilla y rápida, si tu vehículo está en buenas condiciones. Para asegurarte de que todo irá bien, y obtendrás un diagnóstico favorable, puedes hacer una pequeña revisión del vehículo: las luces, el dibujo de los neumáticos, los frenos, la dirección, las escobillas limpiaparabrisas, las puertas y las ventanillas. Asegúrate, también, de que todos los elementos del coche están homologados. Además, puedes hacer una sencilla purga del motor, para que el vehículo pase sin incidencias el control de emisiones, que comprueba que no contamina más de lo permitido. Para ello, debes empezar por comprobar el nivel de aceite del motor –que debe estar entre el mínimo y el máximo de la varilla del depósito, de lo contrario puedes rellenar este– . A continuación, arranca el motor y haz varias aceleraciones con 30 segundos de intervalo. Cuando llegues a la línea de inspección, el vehículo debe a unas 2.500 revoluciones por minuto, si se trata de un vehículo ligero, y unas 1.500, si se trata de un vehículo pesado. El ventilador debe estar siempre en marcha. Entonces puedes dejar el motor al ralentí hasta que empiece la revisión.
La documentación que necesitas para pasar la inspección obligatoria para pasar la inspección es el permiso de circulación y la tarjeta de la Inspección Técnica de Vehículos, que recibe un sello tras cada inspección, y por eso debe ser la original. Del permiso de circulación puedes presentar una fotocopia o una nota simple de antecedentes que se puede obtener en la Jefatura Provincial de Tráfico. Conviene que tengas a mano el último recibo del seguro en vigor, aunque no es obligatorio, y la estación lo puede consultar telemáticamente.
El calendario de revisiones de la ITV depende de cada vehículo, de su tipo y de su antigüedad. En el caso de los turismos, por ejemplo, sólo tienen que pasar la primera ITV cuatro años después de haberlos matriculado. En cuanto a las fechas de cada revisión, no olvides que puedes hacer esa revisión hasta 30 días antes de que caduque la anterior inspección, lo que facilita el poder obtener cita. Esto no varía el calendario de las revisiones posteriores.
Tras la revisión de la ITV, el diagnóstico puede ser favorable, desfavorable o negativo. En el primer caso, el vehículo puede seguir circulando con toda normalidad y obtiene el sello correspondiente. Sin embargo, en los dos casos posteriores, el coche deberá someterse a una comprobación en un taller para subsanar los problemas que ha encontrado la inspección. En caso de un diagnóstico desfavorable, el vehículo podrá circular, pero solo para acudir al taller y, de nuevo, a la estación de ITV. En el caso de un diagnóstico negativo, los problemas encontrados son tan graves, que el vehículo solo puede circular en grúa para acudir al taller. Ambos casos suponen infracciones graves o muy graves.
No se puede circular por España sin tener la ITV en regla. Pasarla es obligatorio. Si circulas sin la ITV, te pueden poner una multa de 500 euros. Además, las autoridades de Tráfico pueden inmovilizar el vehículo, y solo podrás desplazarte hasta el taller para subsanar sus posibles defectos, y a continuación, pasar la inspección. Si circulas con la ITV caducada, la multa es de 200 euros.
Los camiones pesados, de 3.500 kilos, deben pasar la revisión cada año, hasta cumplir 10, y en ese momento, la revisión pasará a ser semestral. Los vehículos pesados deben pasar una prueba especial de frenado, obligatoria desde 2019. En el caso de los remolques, existen dos situaciones: cuando superan los 750 kilos, deberán pasar una revisión propia; pero si no alcanzan ese peso, pueden beneficiarse de la ITV del vehículo al que están enganchados, puesto que tienen la misma matrícula.
Un vehículo es histórico cuando tiene más de treinta años, cuando ha dejado de fabricarse o cuando conserva todas las piezas originales. Desde el año 2023, estos vehículos no están obligados a pasar la ITV si su matriculación fue antes del uno de enero de 1950. A partir de esa fecha, deben pasar la revisión cada dos años, una vez cumplidos los 40 años, cada tres, hasta los 45 y cada cuatro, a partir de los 45.
No existe ninguna obligación de acudir a una estación de ITV concreta. El titular siempre puede escoger la que más le conviene, incluso si se trata de una segunda revisión, por un diagnóstico desfavorable o negativo.
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Una vez que pasas la ITV con éxito, la estación te entrega una pegatina que debes colocar obligatoriamente en la parte superior derecha del parabrisas. Esta pegatina informa a las autoridades de que tu vehículo está en regla. Si no llevas la pegatina, pueden ponerte una multa de hasta 100 euros, ya que se considera una infracción leve. Habitualmente no suele sobrepasar los 80 euros y no supone una pérdida de puntos.
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